7, 25, 50. ‘Ni el estado del bienestar ha muerto ni mantenerlo como hasta ahora lo salvará’, Xavier Puig analiza el futuro del estado del bienestar tras la crisi económica.
En una reunión con empresarios españoles, en un momento de la conversación, se empezó a ver a Angela Merkel algo inquieta. Con ciertos gestos de impaciencia se puso a garabatear algo en un papel. De repente, con un tono educado pero contundente, interrumpió el coloquio y enseñándoles el papel que tenía entre las manos, le dijo a los asistentes: “¿no entienden todavía que el problema que tenemos los europeos es este?”
Y los empresarios españoles pudieron ver que aquel papel simplemente contenía tres números: 7, 25, 50. “Este es el problema de europa” repitió. Me explicaron que se produjo un silencio expectante en la sala. 7, 25, 50.
¿Qué significaban aquellos números? Y la cancillera Merkel se explicó: “Europa representa el 7% de la población mundial, el 25% de la producción industrial del mundo y el 50% del gasto social de todo el planeta”. “Es más, la primera cifra se va reduciendo y la última sigue subiendo”. Aún con el impacto de las cifras en el ambiente, con la pregunta clave Angela Merkel concluyó: “¿es esto sostenible?”
Claves para fomentar el estado del bienestar
En momentos de crisis, los profetas del desastre siempre han tenido mucha audiencia. Es comprensible. Pero suelen ser poco útiles para ayudar a solucionar los problemas con realismo, serenidad y rigor. Tampoco los optimistas compulsivos son de gran ayuda; esperar que todo se arregle por sí solo no parece la mejor receta. En mi opinión, ni el estado del bienestar ha muerto ni mantenerlo como hasta ahora lo salvará. La única receta posible para mantener un buen estado del bienestar al que no deberíamos renunciar es contar con una gestión fina de las cuentas públicas con eficiencia y transparencia. Y no es fácil. significa racionalizar gastos y, por tanto, efectuar cambios en la política redistributiva de los ingresos públicos. Este es el gran debate de fondo que tenemos entre manos los europeos. Ojalá tengamos la voluntad necesaria para afrontarlo con clarividencia.
Si te ha gustado este post quizás también te ineterese este: ¿Por qué sube el petróleo?
Escribir comentario