Oscar Elvira, Doctor en Ciencias Económicas y profesor de la UPF Barcelona School of Management, reflexiona sobre las consecuencias económicas del Ébola.
Justo cuando España empezaba a dar síntomas de recuperación económica… llegó el Ébola. En un hospital madrileño se ha dado el primer caso de contagio en Europa, la enfermera María Teresa Romero. En un momento en que lo más importante sería garantizar que no existe el riesgo de transmisión de dicha enfermedad, y que los infectados recibieran el fármaco para curarse, hay que valorar el posible impacto económico y social.
Sector turístico
En primer lugar el sector turístico, donde los principales tour operadores y agencias de viaje temen que la incertidumbre sobre el riego de transmisión de la enfermedad en España provoque cancelaciones en los desplazamientos de británicos, alemanes y franceses o un descenso del número de reservas. En el caso particular del Reino Unido, hasta el mes de agosto se había incrementado el número de visitantes en un 5,6% y con un gasto anual que superan los 11.000 millones de euros que vendría a ser aproximadamente un 1% del PIB español.
Sector agrícola
En segundo lugar, el sector agrícola (muy tocado ya por la crisis derivada de una menor demanda de Rusia y Ucrania), con la preocupación que se pueda traspasar la enfermedad a través de los alimentos, muchas veces recogidos de los campos gracias a una inmigración africana, que pueden llevar a restricciones laborales y comerciales con España.
Industria farmacéutica
Sin embargo esta situación de incertidumbre es una buena oportunidad para la industria farmacéutica de desarrollar un fármaco eficaz. Numerosas empresas ya están invirtiendo en nuevas vacunas y tratamientos que se encuentran en fase de desarrollo que permitan erradicar la enfermedad, donde destaca Tekmira Pharmaceuticals cuyo fármaco es el TKM-Ébola, BioCryst Pharmaceutical ha desarrollado en antiviral BCX4430, Mapp Biopharmaceutical INc que desarrolla el medicamento Zmapp gracias a inversiones del ejército de Estados Unidos y la Agencia de Salud Pública de Canadá, Toyama Chimcal que produce el antigripal Favipiravir que Japón podría ofrecerlo a la OMS, o bien los gigante farmacéuticos como GlaxoSmith Kline y la división Crucell de Johnson and Johnson están investigando en nuevas vacunas. La esperanza de buenos resultados encontrados choca frontalmente con la presión de la inmediatez en la obtención y comercialización de los mismos.
En las bolsas las acciones de las empresas de viajes (Tui Travel, Thomas Cook), de aviación (IAG, Easyjet, Ryanair), de cadenas de hoteles (NH, Meliá) bajaron sus precios significativamente. Caso contrario de los precios de las acciones de la industria farmacéutica, que no dejan de subir, por ejemplo Tekmira Pharmaceuticals (+200% desde julio) o BioCryst Pharmaceutical (+49% desde enero).
Desde el exterior se exige un comunicado oficial del Gobierno español que explique el alcance de los riesgos para los turistas.
Factor humano
En lo personal cabe suponer reacciones inmediatas de los ciudadanos. En primer lugar el personal sanitario del hospital de Madrid están tomando bajas por el miedo de contagio, se dejará de viajar a África, disminuirá la ayuda humanitaria adecuada en los países (Guinea, Sierra Leona y Liberia), aumentaran los controles preventivos en las puertas de entrada a los países (puertos, aeropuertos), cierre de fronteras de los países colindantes.
Conclusiones
La respuesta dada a la crisis del Ébola no parece ser lo suficiente efectiva, lo que ha provocado graves consecuencias, no sólo sanitarias, sino también económicas y sociales para los países afectados.
A corto y medio plazo, habrá que hacer un esfuerzo en la educación y formación de la población, para evitar el contagio y más manifestaciones en zonas más afectadas.
Artículo publicado en Expansión el 13-10-2014
Si te ha gustado este artículo, te recomendamos: “La economía nunca está en funciones“
Escribir comentario